viernes, 9 de julio de 2010

ALZHEIMER


El Alzheimer es una enfermedad neurodegenerativa. Se caracteriza por la pérdida progresiva de la memoria a medida que las células nerviosas (neuromas) mueren y otras zonas del cerebro se atrofian.
El descubrimiento de la enfermedad fue obra de los psiquiatras Emil Kraepelin y Alois Alzheimer en 1906.
Por cada mil personas, suelen aparecer al año unos 10 ó 15 nuevos casos de demencia generalizada y entre 5 y 8 casos de la enfermedad de Alzheimer.
El riesgo de padecer la enfermedad es mayor en las mujeres y en particular entre la población mayor de 85 años, lo que la edad avanzada es el riesgo principal para sufrir la enfermedad.
Las causas de la enfermedad, aunque no están totalmente descubiertas, se sabe que el deficit de la acetilcolina, el acúmulo de amiloide y los trastornos metabólicos son las principales causas.
Esta enfermedad se caracteriza por la pérdida de neuronas y sinapsis en la corteza cerebral y en otras partes subcorticales. Esta pérdida determina en una atrofia de las regiones afectadas, degenerando el lóbulo temporal y parietal y partes de la corteza frontal y la circunvolución cingulada.
Los síntomas de la enfermedad inicial va desde una insignificante pérdida de memoria a una pérdida más grave conocida como memoria a corto plazo. Después pasa a una etapa moderada, que aún pudiendo realizar tareas con independencia, otras más complejas necesitan asistencia.
Finalmente la enfermedad deteriora la masa muscular, perdiéndose la movilidad.
En el diagnóstico se realizan pruebas de memoria, análisis de sangre y escaner, resonancia magnética, tomografía computavizada por emisión de fotón único, pueden mostrar signos de que existe una demencia sin especificar de cual se trata.
En la actualidad no existe cura para la enfermedad de Alzheimer, pero sí tratamientos que pueden reducir el grado de progresión de la enfermedad, de modo que son de naturaleza paliativa. El tratamiento con Reiki reduce en gran manera el grado de progresión de la enfermedad, en algunos casos han mejorado los pacientes en otros se ha detenido el avance de la enfermedad, de una forma u otra el paciente se beneficia notablemente del tratamiento Reiki.
Para tratar con Reiki el Alzheimer, hacer un tratamiento completo, deteniéndose por más tiempo en la cabeza: frente, cerebelo, sienes, estómago, vientre, rodillas y plantas de los pies.